lunes, 19 de noviembre de 2007

Me duele a mí más que a ti

De un tiempo a esta parte parece que estemos viviendo una cruzada en favor de la circuncisión. Ahora resulta que los circuncidados están menos expuestos a los riesgos del sida. Tiene gracia, considerando que el sida hizo estragos en los EEUU, donde mutilan a todos los niños en cuanto nacen, y los esté haciendo en Africa, donde la mayor parte de los varones sufre idéntica operación en la adolescencia.

Por lo visto, el coito africano causa en el prepucio pequeños desgarros que favorecen el contagio del virus. Digo el coito africano porque está por demostar que otro tipo de coito sea igual de traumático. Prefiero no hacer comparativas entre las paredes vaginales de las negras y el papel de lija, pues hace poco leí un artículo interesantísimo en el que se exponía una curiosa costumbre de las prostitutas nigerianas que puede echar algo de luz sobre el asunto: esas putas pueden cobrar más si antes del coito se irrigan la vagina con agua y lejía a partes iguales. Seca las mucosas.

También se dice que la circuncisión evita el cáncer de cuello de útero. Ya sólo falta decir que también evita la celulitis para que todos los hombres sean circuncidados por Real Decreto y todas las mujeres, hasta las más indiferentes, se lancen a follar como desesperadas.

No hay comentarios: