domingo, 29 de abril de 2007

Nuestra juventud en manos de un imbécil

El director del instituto de Estella, a propósito de las alumnas musulmanas fanáticas que empiezan a exigir un supuesto derecho a asistir a clase con la cabeza tapada por un pañuelo, ha soltado la siguiente perla sociológica en la edición del Diario de Navarra de ayer:

“Tenemos que respetar todas las culturas y esperar que el que venga se adapte si lo considera oportuno

Por regla general, en los centros educativos navarros (al menos en los públicos) no se permiten los símbolos ostentosos de la religión ni se consiente que los alumnos acudan con la cabeza cubierta, para desdicha de ecuatorianos y bolivianos, que parece que se la pegan con Loctite en cuanto les cortan el cordón umbilical.

Si cubrirse la cabeza fuera verdaderamente un artículo de fe, los moros también irían velados, y no sólo las moras. Y aun así no tendríamos por qué aceptarlo.

La frase del director del Instituto no es más que una invitación a que se nos magrebice o se nos andinice con la excusa de la multiculturalidad.

jueves, 26 de abril de 2007

Limbo

La iglesia católica ha declarado que el Limbo no existe y que las almas antaño destinadas a él hogaño van al Cielo. No lo entiendo. ¿Dios obedece los dictados de la iglesia?.

Tampoco entiendo eso de canonizar a la gente. Es dios quien decide si una persona muere santa o no. Dudo que José María Escrivá de Balaguer esté en el Cielo por mucho que el Papa Woytila perdiera el culo para elevarlo a los altares. Donde sí me lo imagino en el Purgatorio y sin fecha de salida por, entre otros pecados, el de simonía y el de soberbia. No estará en el Infirerno porque nadie merece la condenación eterna salvo los asesinos (como ese subnormal coreano que ha matado a 32 personas en un campus estadounidense), aunque quien sabe...

Bueno, curiosamente, la idea que tengo yo del Más Allá casa a la perfección con la idea del Limbo. Y ahora me dicen que no existe...

Lo más preocupante del caso es que antes del siglo no sé cuál (creo que el XIII), según los doctores de la iglesia, los neonatos muertos sin bautizar caían directamente en las calderas de Pedro Botero. Hala. Fijate, los que mueran del siglo XXI en adelante, subirán como cohetes al Cielo para sentarse en una trona a la derecha del Padre. ¿Quién compensa ahora la angustia de aquellos padres medievales que, además de perder un hijo absolutamente inocente –incluso del pecado original, porque qué culpa tenemos nosotros de lo que hicieran Adán y Eva en el Cretácico- lo sabían condenado a las llamas del infierno? Es como para desenterrar las momias de todos los papas del siglo XIII hacia atrás y quemarlas en una pira.

Qué hijoputas.

lunes, 23 de abril de 2007

Pax islamica


Corán. Azora XLVII, nº 4
Cuando encontréis a quienes no creen, golpead sus cuellos hasta que los dejéis inermes; luego, concluid los pactos”

(El País, jueves 20.IV.07)
Tres hombres, un cristiano protestante alemán y dos empleados turcos, murieron ayer degollados en Malatya, en el este de Anatolia, a manos de un supuesto grupo extremista. Las víctimas se encontraban en la sede de la editorial Zirve, que distribuye Biblias y literatura cristiana en Turquía (...) Las primeras investigaciones oficiales sobre la autoría del ataque apuntaban anoche a que no se trataba de un atentado de una organización terrorista, según afirmó en un comunicado la Dirección General de Seguridad de Malatya. "Estamos investigando en todas las direcciones y se está interrogando a los sospechosos detenidos", precisó el comunicado policial. El pastor protestante Carlos Madrigal, que colaboraba desde Estambul con la editorial de Malatya, aseguró ayer que la policía estaba barajando como sospechosos del ataque a militantes del grupo integrista islámico turco Hezbolá, una organización radical minoritaria que no guarda ninguna relación con el movimiento chií libanés del mismo nombre. Los cuerpos de las tres víctimas fueron hallados degollados y atados de pies y manos (...) El doctor Murat Cem Miman, del Hospital Universitario Turgut Özal de Malatya, informó además de la llegada de dos heridos de extrema gravedad. Uno de ellos, identificado como Emre Günaydin, sufrió severas heridas en la cabeza tras saltar por la ventana de la sede de la editorial Zirve. El ministro del Interior turco, Abdulkadir Aksu, aseguró que ese herido era considerado por la policía como sospechoso de haber participado en el ataque. Las fuerzas de seguridad turcas vigilaban anoche la zona de cuidados intensivos del hospital, en la que se encontraba internado. La policía había detenido anoche a cuatro personas más en relación con el ataque. Los agentes también examinaron los ordenadores y documentos de la editorial Zirve para indagar el origen de las amenazas que habían recibido por escrito y por correo electrónico (...) Varios grupos ultranacionalistas habían protestado recientemente contra la editorial Zirve a la que acusaban de hacer proselitismo religioso en la región. En Turquía viven unos 5.000 protestantes, un 60% de los cuales son musulmanes conversos. Hasta el momento, sólo se habían producido incidentes aislados contra iglesias protestantes en el sureste de Turquía. En febrero de 2006 el sacerdote católico Andrea Santoro fue asesinado por un menor de edad en la ciudad nororiental de Trebisonda en plena crisis internacional de las caricaturas de Mahoma, y en ese mismo año otros dos religiosos fueron atacados.

(Declaraciones de Monseñor Bernardini, arzobispo de Esmirna, durante el II sínodo de obispos de Europa, octubre de 1999)
“Europa demuestra una ingenuidad infantil frente al islam porque los términos “diálogo”, “justicia”, “reciprocidad”, “derechos del hombre” y “democracia” no tienen el mismo sentido para los musulmanes que para nosotros... Durante una reunión de diálogo interconfesional, un musulmán influyente no ha tenido miedo de decir: gracias a vuestras leyes democráticas, os invadiremos, y gracias a nuestras leyes religiosas, os dominaremos. Somos especialmente conscientes de este peligro en el Este de Europa, pues no olvidamos la caída de Constantinopla en 1453.

Mahoma difundió su doctrina con el alfanje en la mano. Entonces, ¿por qué algunos se empeñan en declarar que el islam es “una religión de paz”? Por muchos errores que haya cometido el cristianismo, sus seguidores pueden enorgullecerse de que Jesús de Nazaret nunca se manchó las manos de sangre

martes, 17 de abril de 2007

"Apocalypto"


He visto “Apocalypto” de Mel Gibson.

Dejé de ir al cine porque me parece abusivamente caro y porque no me gustan las películas dobladas. Pero “Apocalypto” se proyecta con subtítulos, ya que está rodada en lengua maya y ha sido exhibida así, tal cual, en las salas del país que la produce. No comprendo por qué traducen aquí las películas francesas, o inglesas, que tanta gente podría seguir sin excesivos problemas. Esto sólo puede suceder en España.

No me gustó la anterior película de Mel Gibson, un spaghetti-western titulado “La Pasión". “Apocalypto” es mejor. Mucho mejor. A pesar de toda la violencia que muestra, y que no había manera de soslayar. Reaccionaria, también. Pero bueno, no todo va a ser progresismo en esta vida. Al menos, no pretende engañar a nadie. Agradezco el esfuerzo de Gibson por recrear una atmósfera plausible, empeño infrecuente en esta triste época de correcciones políticas y otras censuras posmodernas. Los mayas eran unos terroristas, al mismo nivel que los aztecas, y su civilización lo más cercano al infierno en la tierra que nadie pueda imaginar. Gibson se toma algunas libertades, como mostrar navíos castellanos antes de hora, pero son perfectamente disculpables: las aproximaciones de Hollywood al medievo europeo suelen rozar el delirio.

La primera mitad me parece una película de terror puro. No lo pasaba tan mal en una butaca desde que vi “El Exorcista”. Vaya manera de soltar adrenalina. Que conste que no era el único espectador horripilado.

La escena de los sacrificios humanos es horrorosa por bien conseguida, por no inventarse nada aunque presenta dos incorrecciones: los sacerdotes mayas no brindaban los corazones al más bien benevolente Kukulkán, sino al sanguinario Huitzilopochtli; y el pueblo no arrojaba los cadáveres decapitados a una fosa a cielo abierto: los devoraba. Creo.

La escalofriante pompa de los mayas: esas mujeres de la nobleza, ultraterrenas, pintadas, depiladas, adornadas con plumas y turquesas; la familia real al completo en la cima de la pirámide, disfrutando de los asesinatos como si fuera una pantomima; el gesto de autosuficiencia del sumo sacerdote ante el eclipse de sol que, naturalmente, su ciencia ha previsto... Los forzados en las caleras, vomitando sangre; la gente muriéndose de hambre en los maizales arrasados por la plaga; el mercado de esclavos... La reducción del ser humano a la condición de un animal... de un animal aprovechable no como fuerza de trabajo, sino como alimento. Qué horror.

La segunda parte me gusta algo menos porque resulta poco verosímil, parece extrapolada de una aventura de Arnold Schwartzenegger. Vale, el protagonista es un atleta, y le impulsa una doble determinación muy poderosa: rescatar a su mujer y evitar una muerte atroz a manos de sus enemigos. Pero por extraordinaria que sea su condición física tras una captura, un cautiverio y una fuga que comprometerían la salud y la cordura de la persona más afortunada de su mundo (o del nuestro) no bebe ni come en días, sufre un flechazo que le atraviesa de parte a parte la zona del hígado, se topa con un jaguar, sufre una segunda herida de flecha que le roza la aorta, salta por una catarata, trepa a los árboles, se pelea a muerte con sus odiosos perseguidores... y finalmente y después de acabar con todos ellos (bueno, quedan dos pero abandonan la cacería), rescata in extremis a su bellísima esposa (la única maya cuyos dientes lucen bellos), recién parida en un cenote inundado y se larga a una tierra menos inhóspita como si toda la peripecia hubiera sido producto de su imaginación.

Mucha de la gente que desconoce y menosprecia la historia de la Conquista de América, se sorprenderá al descubrirse pensando que después de todo la acción de la corona de Castilla fue civilizadora.

Hay que apoyar a:

Georgia, por cambiar su bandera posmoderna (perdón, postsoviética) por otra histórica, llena de cruces, mucho más bonita y más georgiana.

Las personas que estudian idiomas extranjeros que no son inglés. A los estudiantes de francés, de ruso, de chino, de japonés, de amhárico, de wolof… Curiosamente, quienes estudian inglés lo suelen hacer con vistas a prosperar en el trabajo (esos economistas madrileños que hablan inglés con acento cheli me parecen impagables) cuando prosperarían mucho más fácilmente gracias a idiomas con verdadera demanda como son el portugués, el árabe o el swahili, por los que únicamente se interesan filólogos, excéntricos y cerebrines

sábado, 14 de abril de 2007

"Mezzogiorno sulle Alpi"

Mezzogiorno sulle Alpi” es un álbum de Alice, artista que aquí sólo conocen los seguidores de Franco Battiato y los aficionados a las mujeres guapas. Su verdadero nombre es Carla Bissi. Como a tantas italianas, cumplir años le sienta fenomenal. Está mucho más hermosa con cincuenta que con veinte y calculo que alcanzará, al igual que las presentadoras de la RAI, su punto álgido a los cincuenta y cinco.

Alice (no entiendo la manía de tantas cantantes y actrices con quitarse el apellido, absolutamente necesario salvo que te llames Toyah o te hagas llamar Madonna) es contralto. Dice el Gran Consejo de Sabios de Radio Clásica de Radio Nacional de España que, realmente, las contraltos no existen, que sólo son mezzosopranos con vegetaciones. Cualquier persona que haya escuchado a Alice cantar, por ejemplo, “Prospettiva Nevski” sabe perfectamente que el Gran Consejo se equivoca pues una mezzosoprano caería muerta junto al piano si intentara bajar lo que baja Alice, y si no cae ni empieza a salirle humo por las orejas es que se trata de un barítono ruso travestido. A mí, cuando la canto en la ducha, se me mueven los empastes.

Mezzogiorno sulle Alpi” es, de todos los discos suyos que conozco, el que más me gusta. Se abre con “In viaggio sul tuo viso”, canción estupenda rematada con una frase en húngaro que invoca a dios. Yo soy snob y agnóstico (pero agnóstico apostólico romano) por naturaleza y por convicción y estas exquisitecen me chiflan.

Alice se atreve con una versión muy conseguida de una canción de Tim Buckley. Hay también un par de miniaturas deliciosas, envueltas en sintetizadores exangües, que terminan antes de haber empezado, y una rareza niponizante que cierra el disco dejando un regusto similar al que yo sólo he paladeado en ciertas aventuras de Corto Maltés. La audición de “Mezzogiorno sulle Alpi” y la lectura de “La fábula de Venezia” o “Corto Maltés en Siberia” me transmiten sensaciones muy parecidas.

Si Hugo Pratt se hubiera inspirado en ella para crear un personaje de dos dimensiones, Alice podría haber sido el perfecto contrapeso sentimental de Corto Maltés en sus aventuras célticas o en “La casa dorada de Samarcanda”.

Presté “Mezzogiorno sulle Alpi” a muchas personas, pero la última no me lo devolvió. Por caballerosidad, y sólo en este caso y por ser esa persona quien es, no lo he reclamado. Lo echo en falta. Me relajaba. Supongo que podría bajármelo de internet, pero no sería lo mismo.

jueves, 12 de abril de 2007

Gloria oprobiosa


Cada nación europea, hasta las minúsculas, hasta las ficticias (caso de Euskal Herría o de Sildavia) se enorgullecen de aportaciones gloriosas a la cultura universal. Que si Inglaterra la Democracy, que si Grecia la Δημοκρατια, que si Francia el Savoir Vivre, que si España el Saber Vivir… sobradamente conocidas. Pero hay otras que me gustan más. No obstante, como todo no va a ser una de cal, también quiero dar una de arena si bien limitándome a nos y a nuestros vecinos más inmediatos (lo lamento por Irlanda, y por Andorra pero hoy no me siento inspirado, y en cuanto a Mónaco mejor casi no hablar) (Bueno, y Bélgica queda para mejor ocasión).

Por sus aportaciones las conoceréis:

España.
Gloriosa: la siesta. Oprobiosa: el tricornio de charol de la Guardia Civil.

Gran Bretaña.
Gloriosa: el tenis. Oprobiosa: el jamón de York

Francia.
Gloriosa: el urbanismo de los centros urbanos. Oprobiosa: el urbanismo de las banlieues.

Italia.
Gloriosa: Federico Fellini. Oprobiosa: El topo Gigio.

Francia e Italia al alimón.
Gloriosa: Carla Bruni.

España e Italia al alimón.
Oprobiosa: los argentinos.

Portugal.
Gloriosa: Brasil. Oprobiosa: la fonética portuguesa

Holanda.
Gloriosa: La Leyenda Negra Española. Oprobiosa: los tulipanes.



Hay que acabar con:

La música ligera española. Porque si así es la ligera, cómo será la pesada. Un país que ha producido a Enrique Bumbury y a Raphael no puede aspirar a la modernidad. Ni a la normalidad. Ni a la durabilidad. Uno de mis momentos musicales personales irrepetibles: cuando canto “Estoy bailando” de las Hermanas Goggi, imitando el estilo de Enrique Bumbury, y la vecina de abajo avisa al 112.

Tanto trasnochar. Si los españoles durmieran más, conquistarían el mundo. O por lo menos, mejorarían los índices de siniestralidad laboral.

Las series televisivas calcadas de lo que triunfa en los EE.UU. ¿Por qué los productores no se estrujan el cerebro y echan mano de lo autóctono aunque se inspiren en lo alóctono?. Porque una cosa es "inspirarse en" y otra "plagiar a". Podrían tomar como ejemplo, yo qué sé, “Desperates Housewives” pero desarrollándola en una de esas aldeas semidesiertas del Pirineo de Huesca. Un “House” médico de urgencias taurinas en la plaza de Pamplona. Un “Twin Peaks” ambientado en uno de esas urbanizaciones sin alma de la costa malagueña. Un “Mash” de la guerra de Ifni. Un “Mr. Bean” convertido en percebeiro gallego. Los “Soprano” transformados en comando etarra. … “Aida”, que parece tan propia, no es más una fotocopia cañí del show de Roseanne Barr.

Hay que apoyar a:

Beatriz Pecker. He oído el rumor de que se va a acoger al plan de jubilación anticipada de El Ente. Eso sólo podría pasar en España. Hala, a jubilar a profesionales excepcionales para reemplazarlos por becarios que no saben hacer la “o” con un canuto.

A mí los becarios y los mileuristas me caen mal, lo reconozco. Si en vez de estudiar carreras estupendas que el mercado laboral no demanda siguieran módulos de fontanería o de carpintería nunca les faltaría el trabajo, tendrían dónde vivir, podrían marcharse de vacaciones, y no destinarían sus magros ahorros a comprar ansiolíticos con los que combatir la frustración de las expectativas insatisfechas.

Hecho el inciso. ¡Qué recuerdos del programa Don Domingo, que presentaba Beatriz años ha y que tanta música excelente me descubrió! (Bueno, su programa y el de Rafael Abitboll). La verdad es que, oirlo oirlo, lo oía poco porque acababa a las doce del mediodía, hora en la que yo me solía despertar, pero tengo la sintonía final (Madness) mejor grabada en las neuronas que, por ejemplo, la clave de la tarjeta del banco.

Beatriz Pecker compagina ahora la música con el entretenimiento. Pero con un entretenimiento inteligente. Sus programas (“Fiebre del Sábado” antes, ahora “la Plaza”, en Radio Uno), me parecen deliciosos. Nadie es alguien en este país hasta que interviene en ellos.

Beatriz es una buena comunicadora y se puede vanagloriar (pero seguro que no lo hace) de tener una de las risas más saludables del mundo.. ¿Y dicen que se quiere jubilar? Joder, ya se han cargado a Andrés Aberasturi, a Alicia Gómez Montano, a… ¿cómo se llamaba la comentarista de las retransmisiones de gimnasia y patinaje?... para contatar a becarios que no saben sostener un paraguas en una mano y un micrófono en la otra cuando informan de las lluvias torrenciales en el litoral gallego…

¡Ah! ¿Que también jubilan a Ramón Trecet y a los comentaristas de las retransmisiones de atletismo…? ¡Pero eso hay que celebrarlo…!

El uso del subjuntivo. Los sudamericanos lo menosprecian sistemáticamente. No hay que bajar la guardia, como no la bajamos ante las viseras, el abuso del usted, y las cadenotas de oro sobre las sudaderas de colores imposibles. Hoy mismo he escuchado la frase “Te hago un café para tú desayunar” en el mostrador de un bar, pronunciada por una camarera nacida y criada como lejos a cincuenta metros del Orinoco. Ahrg, me tiemblan hasta las calandracas.

martes, 10 de abril de 2007

Agua que no has de beber

Me parece que los periodistas esta vez se han pasado un poco con el asunto de las riadas. Sobretodo los de "España directo" (un programa que me gusta lo suficiente como para sentarme a verlo si paso frente al televisor). Yo, que vivo en un ático, he dormido mal estas noches temiendo que me alcanzara la riada. Ciertos tonos alarmistas son más pegadizos que una caca de perro en la suela del zapato.

Es posible que sorprenda la crecida de un arroyo como el Cidacos pero ¿la del Arga, la del Ebro? ¿Qué tienen de particular? Sus riberas son amplias, y están para eso, para que se inunden en primavera cuando el deshielo es acelerado por lluvias intensas y prolongadas Cada tres o cuatro años hay riada. Es normal. Lo saben perfectamente los habitantes de sus márgenes, a pesar de lo cual construyen y cultivan en zonas aluviales expuestas a ese riesgo cíclico.

Pero a muchos periodistas de Madrid eso de que la gente tenga que achicar agua de los corrales y de las bajeras les suena a catástrofe asiática, o sea: a música celestial, y los ojos les hacen chiribitas porque pueden enviar reporteros, casi como quien dice, en una vespino. Sale barato. Otra cosa sería mandarlos a cualquiera de los muchos lugares del tercer mundo donde acaecen verdaderas tragedias.

Ah, no. Eso está lejos y la gente habla raro y los hoteles no tienen conexión a internet...

Será porque este año las inundaciones han coincidido con la semana santa y los periodistas han deducido sagazmente que la cosa requería dramatismo: a veces parecía que los intrépidos reporteros estuvieran preparando un casting para "La Casa de Bernarda Alba".

Lo peor es que con ese tratamiento de la noticia, se aviva la polémica de los trasvases de Plan Hidrológico Nacional. Claro, un especulador inmobiliario de Murcia o un pequeño empresario turístico de Alicante que vean "España directo" pensarán que de Zaragoza para arriba la gente no es que sea insolidaria, es que es masoquista, y que el agua que va a parar al mar es agua desperdiciada. Claro, también es un desperdicio el deshielo del casquete de Groenlandia: por eso los saudíes, cuando hacen cálculos y se dan cuenta de que el chollo del oro negro se les termina, hablan de comprar bloques de hielo a Noruega y a Dinamarca para embarcarlos en los petroleros que regresan de vacío, e irrigar el desierto de Arabia.

En realidad, qué curioso, que el agua vaya a parar al mar es el curso natural de las cosas. Mucha gente que se espanta ante la homosexualidad o la eutanasia como prácticas contra natura es partidaria de los embalses, de los cultivos transgénicos y de las clínicas de cirugía estética. Qué contradictorio es el ser humano.


Bueno, que pierdo el hilo: si los periodistas pusieran el mismo entusiasmo y el mismo despliegue de medios en otro tipo de reportajes de investigación, este sería un país serio.



Hay que acabar con:

Louise Ciccone (a) "Madonna" antes de que se transforme en una especie de Marujita Díaz italoamericana. Empieza a rozar el ridículo de manera muy peligrosa. Hay que sugerirle una retirada honorable.

Los peinados espantosos. Las mechas atroces. Los tintes de fantasía.

Los psicólogos y los psiquiatras. Suelen ser personas que estudian psicología o psiquiatría para conocerse a sí mismas, pero que no tienen la menor inclinación filantrópica. El prójimo, en el fondo, hasta puede darles asco. Los psicólogos en realidad no sirven para nada. Y si sirven, que lo demuestren. Te dicen a la vez que sí y que no, y dejan todas las decisiones en tu mano. Certifican que todo cuanto te pasa es culpa tuya, confirmando así tus peores sospechas. Son capaces de decirle a un talidomídico que lo suyo es psicosomático y que si sus brazos no han crecido es porque no se esfuerza lo suficiente. Intentan que te conformes con lo poco que tienes, pues podrías ir a peor. Te hacen perder la fe en la humanidad, si alguna vez la tuviste.

Hay que apoyar a:

El Instituto Nacional de Meteorología. Sus pronósticos son muy precisos y su página web, estupenda.

La persona que escoge las corbatas de los presentadores del informativo propio de TV5 Europe.

Esas personas, normalmente hombres, capaces de mantener una conversación fluida en la mesa de al lado de un restaurante silencioso sin que les oigas absolutamente nada de lo que están hablando por más que estires la oreja.

miércoles, 4 de abril de 2007

"Chinatown"

He visto una película en dvd que me ha gustado bastante: "Chinatown" de Roman Polanski. He intentado leer los subtítulos en inglés, pero no pillaba gran cosa, así que me he pasado a la rotulación en castellano. El guión es muy bueno, y las interpretaciones magistrales, sobretodo la de Jack Nicholson. Me gusta su personaje: un investigador privado que se cree mucho más listo de lo que es realmente y cuyas pesquisas acaban mal por su exceso de visión. También está muy conseguido el personaje que interpreta Faye Dunaway: una ninfómana respetable que demuestra tener un gran corazón además de un gran chocho. Lo mejor es, sin embargo, la música de Jerry Goldsmith. El diseño de producción cojea, y la dirección resulta un poco plana. Siempre he echado a faltar algo en las películas de Polanski. Ya sé qué: mugre. Sus decorados son demasiado rectilíneos, demasiado pulcros, demasiado monocromáticos. Por eso sus únicas obras plausibles son las de época ("Tess" y "El baile de los vampiros"), anteriores a la aparición de concepto de higiene.

Hay que acabar con:

Dios. Dios no existe y si existe, no le importamos. Da igual en qué deidad creas: en el cejijunto Yahveh, en el sanguinario Alá, en el terrorífico Baal o en el ciclotímico Dios. Todos se portan parecido, lo único que cambia es el nivel de sacrificio que imponen a sus adoradores. La vida sería tal vez más llevadera si dios fuera como el ratoncito Pérez o como Mary Poppins: un personaje de ficción que no exige nada de ti salvo tu sonrisa. La vida no es un regalo divino. La vida es un azar cósmico más o menos afortunado. Nuestra existencia no tiene sentido. No hay un plan. Nuestras almas –nuestras consciencias- se desvanecen con la muerte y punto. Todas las declaraciones de amor calladas, todas las reconciliaciones aplazadas, los perdones no expresados, las muestras de cariño reprimidas, todo eso y mucho más no dispondrá de una segunda oportunidad en otra vida. Porque no hay otra vida.

El Festival de Eurovisión. Perdí todo el interés cuando participaron Franco Battiato y Alice por Italia y le dieron el premio al representante de Yemen del Norte. Si ser europeo implica algo así, yo pido mi baja voluntaria como ciudadano de este continente.

Los Cuarenta Principales. En mi época eran lo peor de lo peor. Nadie con un mínimo criterio musical escuchaba esa merienda de negros de las discográficas patrias. Y la prensa les hacía luz de gas. No puedo comprender cómo han perdurado hasta nuestros días. Ahora algunas personas se jactan de escucharlas, en plan ofendido agresivo: "¿Qué pasa? Soy un lolailo y escucho los Cuarenta, ¿y qué?"

Hay que apoyar a:

Los investigadores que ponen su ilusión y su talento en tareas que redundan en el beneficio común por cuatro duros mientras que muchos deportistas semianalfabetos ganan millonadas por hacer estupideces en las que intervienen de un modo u otro una esfera golpeable.

La política de integración forzosa de los inmigrantes, sobretodo de los musulmanes. Ah, ¿que no existe esa política? Entonces acabaremos mal.

La gente que es simpática no sólo con sus amistades. La gente que cuando estás mal te dice algo para animarte en lugar de aprovechar la ocasión para hundirte.

lunes, 2 de abril de 2007

Todos somos provincianos

Javier de Burgos, mediante los decretos de nueva planta de 1833, estableció un nuevo orden territorial de España y creó las primeras provincias, en número de cuarenta y nueve, demarcaciones más o menos caprichosas en torno a una ciudad. Así hablamos hoy en día de la provincia de Burgos o de la provincia de Zaragoza, porque son territorios que arropan a esas capitales. Navarra y las Vascongadas, que conservaron su integridad territorial, reciben la denominación de provincia, pero en realidad son territorios históricos de otra naturaleza.
El gobierno de José Bonaparte también intentó un nuevo orden provincial proponiendo el sistema de nominación de los departamentos franceses, basado en los ríos. Por suerte, la idea no prosperó. ¿Qué habrían hecho en Almería o en Mallorca, etc. donde no hay ríos ni siquiera navegables a caballo? Posteriormente se crearon provincias que ahora nos parecen exóticas como Cuba, Puerto Rico, Villafranca del Bierzo o Calatayud, que al final se eliminaron, y hubo unos cuantos titubeos a la hora de adjudicar territorios en litigio, como la ciudad de Irún o la comarca de Laguardia.

En la época de Javier de Burgos no habría muchas personas que compartieran su nombre de pila. Debía de ser como poner hoy en día a un niño Yéremi, Kevin o Stalin. Vale, éstos sólo se emplean en el altiplano boliviano y sus alrededores, pero el santoral católico proporciona nombres que marcan a quienes los portan según la moda del momento, y que suenan raro hasta que dicha moda pasa y nuestros oídos se acostumbran. Por ejemplo: Borja y Goretti. Borja no es un nombre pijo, no señor: es un topónimo asociado a un santo como Javier, o como Lourdes… Ya, terminando de desbarrar, ¿por qué las Bernadette del resto del mundo son Lourdes en España?

Hay que acabar con:

Los futbolistas con las piernas depiladas. Lo propio de un hombre masculino es tener vello abundante, señores asesores de imagen de los clubes deportivos. Puedo admitir que los nadadores se afeiten el cuerpo y las extremidades, pues está demostrado que mejoran sus registros pero, ¿los futbolistas, los ciclistas, los tenistas…, por qué?.

La ropa interior masculina diseñada o por mujeres o por eunucos.

El galicismo "a día de hoy". Cuanto mejor decir "hoy" a secas. También la manía periodística de eliminar el artículo de La Moncloa, La Zarzuela, El Tibet o El Japón (y sin embargo se dice "El Osasuna", qué misterios). Otra cosa que me sorprende de los periodistas contemporáneos es su tendencia a pronunciar todos los vocablos extranjeros según el ejemplo fonético del inglés. De acuerdo a un cronista de deportes no se le puede pedir fondo de armario cultural, pero a uno de de política internacional sí, y éstos suelen ser los peores.

Hay que apoyar a:

El prepucio. Hay una conspiración judeomasónica que desea circuncidarnos a todos esgrimiendo los más peregrinos informes médicos. Ahora dicen que la circuncisión es un buen remedio contra la transmisión de sida en Africa. También dicen que evita el cáncer del cuello de útero. Al parecer, el esmegma contamina tanto como una pequeña central nuclear rusa.

Los hombres tenemos que defender el prepucio con el mismo ardor con que defienden las mujeres sus batiburrillos vaginales. El prepucio proporciona placer a quien lo posee, y protege la parte más delicada de la anatomía masculina. Por si fuera poco, marca la diferencia entre civilización y barbarie. Si los árabes, los estadounidenses y los israelíes conservaran sus prepucios estaríamos a punto de alcanzar la paz mundial.

La idea de trasladar la capital de España a otra ciudad. Madrid es demasiado grande, está demasiado en obras, y no tiene población autóctona. Es tan representativa de España como lo es Eurodisney de Francia. Propongo la candidatura de Teruel: así matamos dos pájaros de un tiro. Teruel por fin existiría, y Madrid volvería a ser el poblachón manchego (¿o era alcarreño?) con el que sueña.