lunes, 24 de septiembre de 2007

Pierre Bourdieu

He estado leyendo un artículo muy interesante acerca de la moda de los chalés y las casitas, extraído de “Las estructuras sociales de la economía”, de Pierre Bourdieu. Obedece a la voluntad de los políticos franceses ultraliberales para acabar con lo “social”. Mediante un chalet y el inevitable crédito a largo plazo (esto es aplicable también a los pisos corrientes) se ata a los ciudadanos al sistema económico porque aumenta la dependencia del trabajador con respecto a su puesto de trabajo, ya que perderlo implica no hacer frente al pago de la hipoteca, donde está implicada su vida entera. Es la “despolitización de las clases trabajadoras urbanas”. En un unifamiliar no disfrutas de la solidaridad de los antiguos barrios obreros ni del aislamiento de los barrios ricos, tienes que desplazarte a tu lugar de trabajo a veces durante horas, y estás privado de las relaciones que se tejían en el barrio, en particular la reivindicación sindical, y es imposible crear en el lugar de residencia, que agrupa a individuos socialmente poco homogéneos, una comunidad de intereses y de afinidades sociales relacionados con la pertenencia a un mismo ámbito de trabajo. El “mito de la casita” frustra al individuo y lo atrapa para desmovilizarlo políticamente.

O sea, que más que a la casita, hay que aspirar al palacete.

No hay comentarios: